En esta ocasión me decanto por un tema al que a duras penas me atrevo a mirar. Siento sudores fríos cuando en algún lugar empiezo a oír que la conversación va tomando ese camino. Intento huir de él y refugiarme en lugar seguro. Deseo desaparecer del escenario y pasar desapercibida. Es superior a mí, me siento incapaz de enfrentarme la política.
Me escandaliza. Siento vergüenza por el teatro en que se ha convertido sistema político al que pertenezco, que más se asemeja a un corrillo de programa televisivo de sobremesa que a una institución que representa a la ciudadanía. Me dejan de piedra determinadas declaraciones, que parecen disputas de patio de colegio, actitudes propias de una pataleta infantil que pueden y tienen repercusión internacional (ver artículo del New York Times "Trogloditas del ejército en España"). Incluso amenazas que vulneran la ley que, al menos como ejemplo, los propios políticos deberían respetar.
¿Qué estamos haciendo con nuestro país? ¿Adónde nos va a llevar todo esto? Estamos a la cola de Europa en educación, la vivienda no es asequible para la gran mayoría, cada día aparecen nuevas mafias, estamos al nivel de Lituania en innovación tecnológica, el empleo es cada vez más precario, estadísticas advierten de que dentro de 30 años, habrá 4 jubilados por cada trabajador… Y desgraciadamente, no aparecen en ningún medio de comunicación soluciones a estos problemas. No hay debates en el parlamento sobre esto. Nuestros políticos parecen preferir temas que alteren la sensibilidad de la gente, y debatir incansablemente sobre un acuerdo ya alcanzado que precisaba para su aprobación de más del 50% de los votos del Congreso al que pertenecen.
Ya hace tiempo que conocí la decepción que me provoca la política. No existe en el “mercado” un solo partido que me motive, ni siquiera en el que me reconozca. ¿Dónde están los políticos que realmente representan los intereses del pueblo? ¿Dónde está la alternativa a la política del marketing? ¿Realmente ya no existen los ideales de igualdad y prosperidad para todos? Ya no confío en una mejora de esta sociedad. No quiero que mis hijos vivan en ella y no se les inculquen por parte de todos, ya sean los profesores, ya sea el entorno social, unos valores que creo imprescindibles. Seguramente no sea la solución, pero cada día me tienta más la idea de dejar mi país, debido a mi reiterada decepción como ciudadana. Sobretodo, creo que en otros lugares, sea mejor o peor el estado actual, existe un ánimo de avance, una lucha por la mejora, que aquí no es perceptible. Cada día pertenezco menos a esta parte del planeta, y el único sentimiento que esto me provoca es la pena de notar que me alejo de un país al que un día estuve orgullosa de pertenecer.

4 Aportaciones:

A las 9:38 p. m.,  porlacara expuso...

Creo que no eres la única en sentir todo eso, yo personalmente tampoco me identifico ni siquiera minimamente con ningún político. Por desgracia, todos van a lo mismo, a llenarse el bolsillo y olvidarse de todo lo que pasa a su alrededor. Me parece que todo el mundo ha pensado alguna vez en emigrar, pero la verd es que últimamente los deseos son cada vez más fuertes...

 

A las 10:13 p. m.,  Anónimo expuso...

Es cierto que a nivel político estamos cada vez peor, pero creo que vayas donde vayas respirarás el mismo aire.
Resignación vs esperanzas.

 

A las 5:39 p. m.,  Aenea expuso...

porlacara
también eso es indignante. No creo que la mayoría de votantes estemos de acuerdo con el camino que está tomando la política, y sin embargo tampoco nosotros hacemos nada.

solojose
esperaría los 15 añitos, pero me da que álvaro no será tan majo para entonces (lo espero por su bien, porque si continúa siendo tan mono se lo van a comer por la calle!)
Patons!

anónimo
yo espero y creo que en otros países se toman más en serio la política. No hay más que ver cómo funciona en los países nórdicos, que no permiten ni las bromas (pásate a ver el último post de Eledu en El diario no diario).

 

A las 7:44 a. m.,  Anónimo expuso...

Cierto es que la política de hoy en día como bien dices no es más que marketing, manipulación mediática, basura, negocio... Pero solamente un porcentaje de la población lo ve. Solamente una visión de libre pensamiento permite criticamente observar lo que está pasando. Aunque es posible que también este intento de mantenerse libre de pensamiento es el que impida quizá una batalla unida frente a esta democracia en la que ya no confiamos muchos.

Espero tu kaftración con gusto ;P

Petons bixu!!!

 

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